miércoles, 11 de abril de 2012

28.

Es una sensación única, es como estar flotando por el cielo pero sin alas, simplemente te sostienes por palabras y más palabras, que día a día te acompañan detrás tuya, aguantando tus tonterías y tus cosas de niña pequeña, tus besos tontos en el cuello, tus risas, todas tus características que te hacen única. Es esa sensación, pero mas que una sensación, es una realidad, por que lo tienes a el que es quien verdaderamente te aguanta, te apoya y sobre todas esas cosas, que te quiere. Puede que te quiera un poco o demasiado, puede que sea un amor abrasador o que ya pica, un amor especial o igual a todos los demás, pero al fin y al cabo es un amor único porque él esta en ese amor, y aunque para los demás sea un amor ñoño para ti, la protagonista de esta película, será un amor de historia, que se podría escribir con el, que se podría hacer un libro tipo "3 metros sobre el cielo" o tipo "el cielo esta en cualquier lugar", una historia de esas que no se repiten, de esas inigualables e inolvidables. Pero eso si, siempre estarás flotando sobre el suelo, soñando con los ojos abiertos.



martes, 10 de enero de 2012

Ese momento cuando besas a alguien y desaparece todo lo que tienes alrededor y lo único que existe eres tu y esa persona. Y te das cuenta de que esa persona es el único hombre al que debes besar el resto de tu vida y sientes por un momento algo realmente asombroso y quieres reir y también llorar. Te inunda la felicidad de haberlo encontrado y te invade el temor de perderlo al mismo tiempo.



:)

Cómo me gusta mi sonrisa. Y sobretodo, cómo me gusta la tuya.

martes, 29 de noviembre de 2011

voy a quererte como tú quieres.

+ Te quiero, ¿me oyes? te quiero. Y sería capaz de subir al palo mayor para que todos se enterarán y que lo escuchara hasta la última persona del mundo, hasta quedarme sin voz. 
- Y quiero decirte que te quiero todas las mañanas, y todos los segundos, y que no voy a parar hasta conseguirlo, y hasta que me muera de no dormir, de no tenerte, de no entenderte, voy a quererte como tú quieres, sin preguntas.

Como una dulce canción tocada sólo para mi

No pretendo que me regales una historia de amor, ni siquiera un verano inolvidable, bueno quizá esto último sí. Quiero divertirme en tus brazos, devorar tus labios, tocarte, sentirte, quiero que lo pasemos bien, quiero por lo menos ser un recuerdo en tu vida, que pienses en mi, mientras vuelve mi imagen a tu cabeza y aparezca en tu boca una irrevocable sonrisa.

Tal vez olvidamos todo lo que somos cuando estamos juntos.

Y da igual todo lo demás, porque cuando recuerdas la primera vez que le viste, supiste que podría haber 50 tanques impidiéndote el paso, que tú vas a luchar por él, que te enfrentarías a un ejercito entero por verle en el último segundo de tu vida.

:)

-¿Palomitas?- Me dijo.
-Mm..- Había estado pensando que necesitada de mi ayuda para que el día fuera perfecto- Pues, ¿por que no?
Nos sentamos en la butaca del medio. Delante de nosotros había una pareja, cuando nos sentamos me dio un toque en el brazo y me los señaló.
-Atención.- Me dijo estirando la parte de debajo del ojo.
-A ver. ¿Voy a tener que mirar arriba verdad?
-Valla, me conoces.
-Demasiado.
-Me encanta.
-¿El que?
-Nada.
-Arg.
-Vale, ¿me dejas?
-Está bien- Le dediqué una sonrisa.
-Bien.
Cogió un puñado de palomitas y se lo tiró a la pareja. Nos miraron, y miramos a los asientos de detrás.
Confusa la pareja siguió viendo la película. Nuestras risas eran inaguantables. Le adoraba por hacerme reír.
-¿Te sientes bien?-Me dijo.
-Sí, pero la película te esta aburriendo, ¿verdad?
Asintió con la cabeza.
-Larguémonos.
Salimos de la sala, llevándonos por delante media caja de palomitas. Nos volvimos a reír y esta vez con más intensidad, todas las caras nos miraron cuando él me dijo al oído:
-¡Corre!
Corrimos hasta el parque que estaba al frente de la playa. Me senté en el columpio y el se apoyó un tubo.
Después de recobrar el aliento nos quedamos serios mirando al suelo, nos miramos y empezamos a reírnos.
-Nunca vuelvo a venir al cine contigo- Dije casi llorando de la risa.
-Vamos, no fue tan malo. Por cierto tienes una pequeña lágrima en el ojo- Empezó a reír.
-Creo que eres el único que me las saca sin hacerme daño.-Dije limpiándomela
-Me alegro.
Sonreí.
Caminamos el paseo marítimo. Nos paramos enfrente de una cristalera, me quito las gafas y se las puso el.
-¿Me quedan bien?
-Te lo discuto.
-¿Tan mal me quedan?
-No.- Dije con ironía.
Me empujó y al hacerlo se me bajo una asa de la maleta. Me puse recta y me la subí seria.
Me miró como si se fuera a morir de amor. Me cogió el brazo y me rodeo con los suyos, parecía que necesitaba hacerlo y había esperado para hacerlo. Le abracé, me cogió de la cara, le agarré las manos, se puso lo más cerca que podía de mi, me miró a los ojos y subió a mi frente y me beso en ella.
-Gracias.-Dije.
Me sonrió, ¿se me notaba tanto que tenía miedo? no quise pensar en ello.
Me cogió de la mano y sacó la cámara. Nos sacamos una foto en la cristalera. Me rodeó con su brazo, me acercó a el y me beso en la frente. No es que no quisiera besarle, pero tenía miedo. Continuamos caminando por el paseo agarrados de la mano.
Entramos a una tienda donde vi una pulsera en la que estaba inscrito 'Mi amor', sonreí y la volvía dejar en donde estaba. Le miré y estaba mirándome.
Yo salí primero de la tienda, tuve que llamarlo para que viniera. Cuando salió me cogió de la mano y nos fuimos a la parada de autobús. Nos sentamos en los bancos y me dijo:
- ¿Has quitado la foto de él que estaba en tu techo?
Miré hacia abajo.
-No puedo.
-¿Quieres que te ayude?
Asentí con la cabeza, me rodeo con el brazo y me dejó junto a el.
Llegamos a mi casa, se subió a la cama, despegó la cinta adhesiva y lo quitó del techo.
-¿Quieres acompañarme, por favor?
-¿A dónde?
-A empezar desde cero.
Mis ojos brillaron con la luz del sol y lo miré con cariño. Cogió la foto y una caja pequeña que se sacó del bolsillo.
Me llevó hasta un descampado.
-Lo que pase aquí se quedará aquí, de esa forma no recordarás nada del pasado.-Me dijo.
-Pero..
Cogió un mechero y quemo la foto. Mis ojos empezaron a brotar gotas, que iban dejando su camino húmedo por todo mi rostro.Cuando la foto se consumió por completo me abrazó.
-Todo estará bien.-Dijo con total seguridad.
Metió su mano en el bolsillo y saco la caja pequeña. Me la dio y la abrí.
Rompí a llorar, esta vez de felicidad.
Era una pulsera, era la pulsera que había visto en aquella tienda del paseo marítimo.
-Te quiero.-Dije.
Me abrazó
-Nunca estarás sola.
Una ráfaga de viento me acarició el pelo. Me cogió la cara cómo lo había echo anteriormente le cogí de la manos y se acercó lo mas que pudo, su nariz rozaba la mía.
Notaba como mi corazón va a cien, pero a pesar de ello me sentía segura.
Aparte sus manos de mi cara y por un momento se le borró la sonrisa de la cara, le cogí por la nuca y lo besé. Noté como me cogió por la cintura y me elevó. Tenía tanta fuerza, tanta pasión acumulada.
Me abrazó.
-Gracias.
-¿Gracias?
-Gracias por haberme esperado.
-Te volvería a esperar.
Le abracé.
-Te amo.-Me susurró al oído
Me escondí en su cuello y le dije:
-Y yo a ti.